foto catedral antigua de barcelona

Catedrales neogóticas Barcelona

La apariencia dice una cosa y la realidad otra muy distinta sobre nuestras ciudades y sobre nuestra historia; al final es cuestión de datos, de ganas y de recopilar fechas según nos cuentan.

Más allá de lo aparente y de la verdad.

La catedral de Barcelona viene siendo gótica desde los libros de la escuela, y para cualquier barcelonés o barcelonesa pre-olimpiadas su visita obligada en el barrio gótico y su indiscutible apariencia recargada y compleja típica del gótico, nos reafirmaba en ese estilo y para que íbamos a dudar del discurso oficial.

Pero la apariencia y algunos de los elementos más pomposos que la definen y circunvalan, entre ellos el famoso «Pont del Bisbe» del 1928, ya por la fecha podemos apreciar que no son lo que parecen, y la cuestión es, ¿por qué nos hicieron creer que sí?

Una imagen vale más que mil palabras, y la verdad es que todo es mucho más sutil de lo que parece, menos las mentiras que no se ocultan, solo se ha de investigar un poco y entender la cronología.

Este tema es mucho más que una reconstrucción, es una clara voluntad escenográfica, y en el lugar de los restos históricos de la primitiva basílica paleocristiana, de la Catedral románica posterior las obras se iniciaron el 1 de mayo de 1298, se ha creado un interesante parque temático. Pero veamos porque fotos de ese momento por allá el XIII no disponemos, y nos remitiremos entonces a las imágenes que si disponemos.

Si nos mantenemos en estrictos detalles de esta imagen del XIX, en relación a la ubicación, volumen y disposición de los vanos: puertas y ventanas, vemos que la puerta tiene un arco románico, pero en cualquier caso lo que tenemos no es la apariencia del actual edificio y de un supuesto gótico grandilocuente. Esa formalidad se lo debemos a hechos muy posteriores con motivo de la Exposición Universal de 1888 en la que la ciudad se engalanó, y al parecer es un industrial barcelonés Manuel Girona Agrafel el que sufragó la obra de mistificación de la fachada y de sus dos torres laterales con el resultado del actual esplendor con el que hoy la conocemos, la visitamos y admiramos; gracias al arquitecto Josep O. Mestres que la finalizó en el 1913.

Por lo tanto todos los detalles que aparentemente la hacen gótica y que la definen estéticamente como contemporánea a la época que señala la historia se inicia en Francia y llega a España a finales del XII para finalizar con el renacimiento, no corresponde a ese estilo.

Otra Iglesia casualmente se inicia y no se acaba por esa misma época, la archi famosa post-olimpiadas basílica católica de Barcelona de la Sagrada Familia, diseñada por el arquitecto Antoni Gaudí, iniciada en 1882, y gracias a la fotografía de 1905 podemos ver por donde iban las cosas.

No podemos sin más enclavar todo este proceso en la revolución urbanística de la ciudad iniciada en 1860 por el polifacético ingeniero, político, jurista nacido en Centelles Ildefons Cerdá, y su plan Cerdá, que tenía obvio en cuenta ambas localizaciones.

La historia de la fotografía común o para el vulgo está fechada desde el 1827 hasta que comienza la historia del obturador de 1880 según explican.

En el plano topográfico de 1855 del llano de Barcelona que se encuentra en el interesantísimo ARCHIVO HISTÓRICO DE LA CIUDAD, en un edificio muy cerca de la catedral denominado la casa de l´Ardiaca  (en castellano Casa del Arcediano), con sus sucesivas reinterpretaciones desde que es adquirida por Jordi Altimira en 1870 en una subasta, pues bien en ese documento hoy aún es posible ver la localización de La Ciudadela que fue destruida en 1868.