Ordenes militares, la moda de una época

miravet castillo templario

Moda = Gusto, costumbre o uso, o conjunto de ellos, propios de un grupo, un período de tiempo o un lugar determinados.


La fascinación por la orden de los #templarios nos sitúa no solo en una época sino como reza el título del artículo en una moda.

¿Qué esconde una fortificación de tal magnitud casi hermética e infranqueable en una ubicación privilegiada como es el meandro de un gran río? 

Los caballeros templarios es un tema recurrente en el canal historia de esta web de conocimiento y revisión histórica; es su simbolismo, sus construcciones, las ubicaciones geográficas que escogen lo que nos atrae desde que en torno a 1119 recibieron el reconocimiento papal en 1129 y constituyeron una organización global de poder iniciada por nueve caballeros franceses de la que en realidad poco se sabe y cuyo lema es el famoso;  Non nobis, Domine, non nobis. 

Anterior a esta y con seguro trazos comunes estuvo la Orden del Santo Sepulcro de Jerusalén o La Orden Ecuestre del Santo Sepulcro de Jerusalén fue fundada por Godofredo de Bouillon en 1099.

La palabra que da nombre a la ciudad de Santa de Jerusalén viene del latín «hierosolima» y esta del hebreo «Ierushalaim» (ירושלים = Ciudad de la Paz). Ieru es ciudad y shalem es el conocido shalom (saludo y despido que indica «paz» y «bienestar»). Según la tradición judía, el rey David de Israel y Judá conquistó Jerusalén en el año 1004 a.C. y la convirtió en capital de su reino unificado, pero su nombre aparece ya en textos de escritura cuneiforme (*) del siglo VIII a.C. y es es Urusalimmu.

Pero no fueron la única orden militar de entonces el 27 de enero de 1158 nacía la Orden militar de Calatrava, la primera que emulaba en España el espíritu de sacrificio guerrero de las órdenes del Santo Sepulcro, la que se supone tomó el relevo tras la expulsión de la Orden de los Pobres Caballeros de Cristo del Templo de Salomón (Pauperes Commilitones Christi Templique Salomonici) de la realidad cristiana de entonces por el Clemente V en 1312.

Es sin duda una época que recoge muchas otras iniciativas religiosas, organizadas y militarizadas como la orden militar soberana de Malta, u orden hospitalaria de San Juan de Jerusalén originada en 1136, en Malta claro, en el contexto histórico que se denominó la Cruzadas, que lo que indica su nombre es otra simbología o iconografía esencial de las religiones, en algún sentido fue una batalla de cruces, de hecho todas ellas con algunas variantes combinadas por ejemplo como la flor de Lys, empuñan como estandarte esta figura ancestral como son las dos líneas cruzadas.

Las Cruzadas tiene su origen bélico a finales del siglo XI, cuando el emperador bizantino Alejo I solicitó ayuda al Papa Urbano II para proteger a los pueblos cristianos de las tierras de oriente ante la dominación musulmana, batalla de cruces.

En otro lado del mapa, otras ordenes que encontramos con objetivos comunes es la orden de Santiago original de Cáceres, en 1158, o no muy lejos la orden de Alcántara en 1117, fundada por el conde Enrique de Borgoña ( Bourges en su originario nombre francés)  para proteger la plaza de la actual población extremeña de Alcántara cuyo nombre que tiene su origen en la voz árabe al-qántara, “el puente”).

Para definir una moda es importante enlazar los trazos comunes además del supuesto timing del tiempo histórico que comparten, porque no hay que olvidar que lo que nos ha llegado son historias, leyendas, y simbología en escultura y arquitectura o incluso tal vez ritos que aún desconocemos.

(*) La definición de cuneiforme fue acuñada por Thomas Hude ( 1636-1703) haciendo referencia a uno de los sistemas de escritura más antiguos conocidos por sus formas simbólicas de «cuña» que se realizaban con un punzón en barro blando en la zona de la actual Iran e Irak, es decir Mesopotamia.