Noche de san Juan

Solsticio de verano

El instante exacto en el que se produce el cambio de estación de primavera a verano, cuando el sol quieto, del latín, solstitium, el astro rey se encuentra más cerca del hemisferio Norte.

Para los de nuestro hemisferio, la estación oficial de verano empieza el 20 o 21 de junio, con la llegada del solsticio de verano o la tan esperada noche de san Juan, aunque ambas celebraciones no coinciden el mismo día.

¿Por qué la noche de San Juan no coincide con el solsticio de verano?

Si bien la festividad de la noche más corta del año tiene orígenes antiquísimos y en muchas culturas ya se realizaban celebraciones al aire libre y festejos mágicos en torno al fuego , la noche de San Juan como festividad ya pertenece a un solo credo. Es la noche en la que se celebra de madrugada del día 24, es decir a las 00:00, el nacimiento de San Juan Bautista, una festividad cristiana venerada por muchos por ser este el apóstol que instauró el bautismo, o baptismum, sumergir, entre los cristianos.

El error tiene un origen posterior, proviene de la modificación del calendario juliano ( Julio César desde el año 46 a.C) al gregoriano realizado por el Papa Gregorio XIII, el 4 de Octubre de 1582. Con anterioridad si había coincidido el solsticio en el 23, 24, o incluso el 25 de junio.

Algo realmente poderoso y extraño que tiene el origen de un reajuste eclesiástico de la iglesia católica para que sus fiestas de guardar como la semana santa no acabaran rotando con los años. Algo que influyó en todo el mundo, a raíz de los acuerdos en el Concilio de Trento, tarea que les ocupó veinticinco sesiones entre los años 1545 y 1563 acabarla.

Se ajustó según un estudio realizado por científicos de la Universidad de Salamanca, dónde se estimó que un año trópico es de 365,242189 días, una diferencia de un 0,002% respecto al calendario juliano, en Inglaterra se instauró en 1792, y aun hoy hay iglesias ortodoxas que se rigen por el calendario juliano, anecdótico es que autores célebres como Cervantes o Shakespeare no murieran cuando dicen que murieron exactamente, ya que por el camino se perdieron algunos días, sin importancia.

Ajuste arriba o abajo, lo que no cambia es el momento en que el Sol, visto desde la Tierra, alcanza su máxima declinación Norte (+23º 27′), es decir la altura máxima del Sol al mediodía se mantiene casi estática durante varios días, de ahí el nombre de «Sol quieto» de verano que da inicio al verano en el hemisferio norte y al invierno en el sur.

 El solsticio acontece durante el verano y el invierno, mientras que el equinoccio se presenta al inicio de la primavera y el otoño.

El condicionamiento antrópico * no acaba aquí en relación a los ritos de la celebración de la llamada noche mágica de año; las hogueras en realidad son de origen pagano, y pertenecen a ritos ancestrales que aún perduran, a pesar de que el cristianismo les quiso dar un sentido histórico con otro relato,» la cabra siempre tira al monte», diría el refranero.

La humanidad siente aún la tradición ancestral de que tal vez el fuego ahuyente a los malos espíritus y purifique el alma, algo por otra parte está sintiéndose del todo necesario como antaño profesar a un culto solar que pase lo que pase siempre está allí, mientras los calendarios cambian según decreto de poder humano.

 Los celtas celebraban el Alban Heurin, luz de la ribera, litoral, un momento lleno de magia y poder, con hadas, dioses o ninfas

Se cancela cualquier relato anterior a cualquier variedad de rito o culto al sol y la tierra, a partir del año 380 d.C. cuando el emperador Teodosio I firmó el Edicto de Tesalónica, el Cunctos Populos y instauró y oficializó el rito cristiano para todo el imperio romano, apartando toda la magia, mitología y leyendas que habían reinado desde el neolítico en muchas de las tierras agrupadas por el gran imperio.

Algunas de ellas tenían que ver con la fertilidad, o las cosechas, o espíritus malignos, pero todas ellas con muchas creencias muy humanas, que se transmitían de generación en generación como por ejemplo el poder sanador que otorgaba ese momento solar a las plantas y que eran recolectarlas esa misma noche.

*Definición RAE de «antrópicoantrópica» adj. Producido o modificado por la actividad humana.